Después de haber realizado un parón debido a unas vacaciones que te has querido dar, un descanso de unas semanas o por el simple hecho dejaste el gimnasio por falta de tiempo (estudio/trabajo). Llega la hora de volver a empezar, y se trata de unos momentos más duros debido a la pereza que le puede generar por la falta de motivación. En este articulo, por lo tanto, voy a dar las variables que se deben dar para optimizar la vuelta al entrenamiento. Aunque, también depende totalmente de la persona y la motivación que tiene cada uno para volver de una forma mucho más beneficiosa y con un objetivo definido.

LEY DEL UMBRAL

 Ley de Umbral, establece que para que un estímulo provoque adaptaciones, este tiene que sobrepasar cierto umbral, el cual es propio de cada persona (genética) y sus circunstancias (adaptaciones previas, entorno hormonal, etc). Es decir, que el estímulo necesario para que el cuerpo reaccione y ponga en marcha los mecanismos de adaptación es diferente en cada uno de nosotros.

Tras un periodo vacacional, se pueden dar diferentes situaciones respecto al entrenamiento:

– Un estímulo que no supere el umbral da lugar a que no haya efectos adaptativos y produciría un infra-entrenamiento.

– Un estímulo que llegase al umbral podría servir de mantenimiento.

– Un estímulo que sobrepasase el umbral y permaneciese por debajo de la tolerancia máxima resultaría en un estímulo óptimo para progresar.

– Un estímulo demasiado alto nos llevaría al sobre-entrenamiento.

VARIABLES QUE DEBEMOS CONTROLAR

-El volumen de entrenamiento, como la cantidad de series, repeticiones y peso total que se realizan en una sesión.

Frecuencia de entrenamiento, como la cantidad de veces a la semana o por sesión que se entrena un mismo grupo muscular o se realiza un mismo movimiento.

-La intensidad. Tras un periodo vacacional la tolerancia a la alta intensidad puede disminuir y, por tanto, no ser capaces de rendir de una forma adecuada. Es por ello que, debemos ajustar la intensidad.

– La selección de ejercicios.

Todo esto, afecta para que la vuelta al entrenamiento sea lo más beneficiosa posible. De todos modos, cada uno debe saber escuchar a su cuerpo y tener muy claro hasta dónde puede llegar. En ningún caso hay que forzar a dar más de lo que eres capaz. Siempre debemos cuidar que la vuelta a la actividad sea progresiva, controlada y lo menos lesiva posible.

VUELTA AL ENTRENAMIENTO

Navegación de la entrada


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *